ACERCA DEL SITIO
Los turistas nunca están equivocados. Allí donde se concentran es porque merece la pena ir. Países como Egipto o Italia, ciudades como París o Nueva York, lugares como Petra o las cataratas del Niágara, están siempre llenos de gente porque son sitios fascinantes.
Pero existen otros destinos no tan transitados a los que merece la pena viajar. Muchos tienen un enorme patrimonio artístico o cultural, una naturaleza desbordante o una calidad humana que puede hacer feliz al viajero más exigente.
Viajar es una forma de enriquecerse personalmente, pero también de ayudar a los desfavorecidos. El turismo genera riqueza y supone un apoyo importantísimo para la economía de los países en desarrollo.
En este blog se ofrecen destinos alternativos al turismo de masas.